La respuesta es sí: se ahorra calefacción al apagar los radiadores. Por lo tanto, si estás en casa con la calefacción puesta, pero solo estás usando una de las habitaciones, acuérdate de cerrar la llave de otros radiadores que tengas, por ejemplo, en el cuarto de baño, el pasillo o la cocina, siempre que estés seguro de que no vas a entrar en estas estancias con frecuencia.
Además, también es posible ahorrar en calefacción al apagar los radiadores si vamos a salir de casa. Esto rompe el mito de que si dejas la calefacción encendida todo el día a una temperatura constante, se ahorrará más energía que si se enciende y se apaga. Si no vives en una zona de frío extremo, apagar la calefacción por la noche o cuando vayas a salir de casa durante un buen rato puede suponerte un ahorro de entre un 10% y un 20%, según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Eso sí, no apagues y enciendas la calefacción de forma habitual. Recuerda que la temperatura ideal para calentar un hogar es de 21 ºC, por lo que no pongas la calefacción a 25 ºC, por ejemplo, para apagarla a la media hora y luego, volverla a encender a una temperatura elevada.